
En un contexto marcado por la reindustrialización, la automatización y la presión por ser más eficientes, la Ingeniería e I+D se ha convertido en un área absolutamente estratégica. Ya no hablamos solo de “mantener la fábrica en marcha”, sino de rediseñar procesos, desarrollar nuevos productos, reducir consumos y anticipar los cambios regulatorios y de mercado.
Desde Melt Group lo vemos a diario: las compañías que invierten en talento especializado en Ingeniería e I+D son las que mejor resisten la incertidumbre, innovan más rápido y consolidan ventajas competitivas difíciles de replicar.
En este artículo analizamos qué perfiles lideran hoy la innovación industrial, qué competencias se están demandando y qué retos afrontan las empresas para atraer y retener este talento.
Por qué la Ingeniería e I+D es un área crítica para la industria
Durante años, muchas organizaciones han tratado la Ingeniería e I+D como un “coste necesario”. Ese enfoque está quedando atrás. En sectores como alimentación y bebidas, químico, energía, construcción o maquinaria industrial, la Ingeniería e I+D se ha convertido en un generador directo de valor. Algunas razones:
La presión por optimizar costes sin perder calidad exige rediseñar procesos, líneas y layouts industriales.
La transición energética y las nuevas normativas impulsan proyectos de eficiencia energética, descarbonización y economía circular.
La competencia global obliga a acortar el time-to-market de nuevos productos y mejorar los existentes.
La automatización, la robótica y la sensórica han hecho que la Ingeniería e I+D sea clave para desplegar soluciones de Industria 4.0.
En este escenario, los departamentos de Ingeniería e I+D dejan de ser “un soporte técnico” para convertirse en socios estratégicos de Operaciones, Dirección General, Calidad o Finanzas.
Perfiles clave en Ingeniería e I+D que están liderando el cambio
Aunque cada sector tiene sus particularidades, hay una serie de perfiles en Ingeniería e I+D que se repiten en prácticamente todos los entornos industriales.
Ingeniero/a de Procesos
Es la figura que revisa cómo se fabrica y cómo podría hacerse mejor. Trabaja sobre:
Reducción de mermas y tiempos de ciclo.
Mejora de rendimientos de línea y OEE.
Estandarización y documentación de procesos.
En muchas plantas, el ingeniero de procesos es el “traductor” entre producción, mantenimiento, calidad y dirección industrial.
Ingeniero/a de Automatización y Control
En entornos donde la robotización y los sistemas de control son críticos, este perfil de Ingeniería e I+D es clave para:
Programar PLCs, SCADA, robots y sistemas de visión.
Integrar nuevas máquinas en líneas existentes.
Asegurar que los cambios no comprometen la seguridad ni la disponibilidad de planta.
Su trabajo impacta directamente en productividad, seguridad y estabilidad del proceso.
Responsable de I+D de Producto
Centra su actividad en la formulación, diseño y mejora de productos:
En alimentación y bebidas: nuevas recetas, reformulaciones más saludables, mejora de vida útil.
En químico y pharma: nuevos desarrollos, escalados de laboratorio a planta, cumplimiento normativo.
Este rol conecta la voz del cliente, los requisitos regulatorios y la capacidad industrial de la planta.
Responsable de Ingeniería y Mantenimiento
En muchas compañías, la Ingeniería e I+D se articula a través de una dirección que integra inversión, mantenimiento y mejora continua. Sus funciones suelen incluir:
Definir la hoja de ruta de inversiones (CAPEX).
Priorizar proyectos de ampliación de capacidad, automatización o digitalización.
Liderar equipos de ingeniería, mantenimiento y proyectos.
Es una posición especialmente crítica en empresas en expansión o en procesos de modernización de planta.
Project Manager de Ingeniería e I+D
Coordina proyectos complejos, muchas veces con proveedores, ingeniería externa y equipos internos. En Ingeniería e I+D es habitual que gestione:
Nuevas líneas de producción o ampliaciones de planta.
Proyectos de integración de sistemas (MES, ERP, soluciones de data o trazabilidad).
Proyectos subvencionados ligados a innovación y sostenibilidad.
Combina visión técnica, control de plazos y gestión económica del proyecto.
Técnicos/as de laboratorio y desarrollo
Sin ellos, muchos proyectos de Ingeniería e I+D no pasarían del power point. Son quienes:
Ejecutan ensayos, pruebas y validaciones.
Documentan resultados y ayudan a construir el conocimiento técnico de la empresa.
Dan soporte al escalado de prototipos a producción.
Son perfiles menos visibles, pero esenciales para que la innovación sea tangible.
Qué competencias se valoran hoy en Ingeniería e I+D
Las empresas ya no se conforman con un buen expediente técnico. En los procesos de selección que gestionamos, vemos un patrón claro: los mejores profesionales de Ingeniería e I+D combinan conocimiento profundo con visión transversal.
Entre las competencias más demandadas:
Visión de negocio
Se valora cada vez más que los perfiles de Ingeniería e I+D entiendan:
Cómo impactan sus decisiones en coste, calidad y servicio.
Qué implicaciones tiene un cambio de proceso en pricing, posicionamiento de producto o servicio al cliente.
Cómo priorizar proyectos en función del retorno y la estrategia corporativa.
Orientación a datos
La digitalización de planta y el despliegue de soluciones de Industria 4.0 hacen que la Ingeniería e I+D se apoye cada vez más en datos:
Uso de herramientas de análisis para tomar decisiones.
Familiaridad con OEE, indicadores de calidad, consumo energético, etc.
Capacidad de interpretar dashboards y traducirlos en acciones concretas.
Trabajo transversal y comunicación
Los proyectos de Ingeniería e I+D rara vez se ejecutan en solitario. Se requiere:
Capacidad para coordinar con producción, mantenimiento, calidad, compras, finanzas…
Habilidades de comunicación para explicar proyectos técnicos a públicos no técnicos.
Gestión de stakeholders internos y externos (proveedores, ingenierías, centros tecnológicos).
Mentalidad de mejora continua
Lejos de los proyectos “de un solo disparo”, la Ingeniería e I+D se construye cada vez más sobre ciclos de mejora y aprendizaje:
Pensamiento crítico y enfoque Lean.
Capacidad para cuestionar el “esto siempre se ha hecho así”.
Abierto a nuevas tecnologías, metodologías y formas de trabajar.
Retos para atraer talento en Ingeniería e I+D
El talento de Ingeniería e I+D es escaso, especialmente en determinados territorios y nichos (automatización, procesos especiales, sectores regulados…).
Los principales retos que detectamos son:
Competencia intensa entre empresas dentro de la misma zona geográfica o sector.
Proyectos poco visibles o con poca relevancia interna, que restan atractivo al rol.
Falta de planes de carrera específicos para Ingeniería e I+D, lo que empuja a los profesionales a buscar alternativas fuera.
Percepciones desactualizadas sobre la industria (turnos, rigidez, poca innovación), que dificultan captar talento joven.
En este contexto, no basta con publicar una oferta estándar: hay que construir una propuesta de valor clara para el talento de Ingeniería e I+D.
