Para el adecuado funcionamiento de tu empresa en todas las áreas debes tener perfecta armonía de todas las responsabilidades propias para su manejo, y una de ellas es la identificación de ciertos hábitos que pueden ser dañinos dentro del clima laboral interno. Aunque el término procrastinar no es seguramente el más conocido, lo más seguro es que alguna vez hayas sido víctima de él o conozcas a alguien que lo haya sido.
En Melt Group, consultoría de RRHH, queremos ayudarte a entender este término y así detectarlo a tiempo a la hora de que se presente en tu entorno laboral.
¿Qué es procrastinar en el trabajo?
Procrastinar en el trabajo es el mal hábito o costumbre que tienen algunas personas de posponer ciertas actividades, tareas, ocupaciones y situaciones que deben atenderse con rapidez, reemplazándolas por otras con menos importancia, pero que le generan mayor agrado. En otras palabras, el acto de procrastinar consiste en lo que llamamos “dejar las cosas para el último momento.”
Podemos determinar la procrastinación como una forma de inconsistencia temporal: es preferir de manera inconsciente la gratificación inmediata por encima de una potencial recompensa futura. Aunque tengas conocimiento de que no debes procrastinar porque tienes el deber de terminar tu labor, es mucho más tentador hacer algo en el instante y sentir una gratificación propia que trabajar en base a un objetivo a largo plazo.
¿Cuál es el origen de la procrastinación?
La procrastinación tiene su origen en el hecho de priorizar el placer frente al dolor. Esto significa que las personas damos mayor importancia a las cosas que nos aportan satisfacción y preferimos posponer todo aquello que nos origine dolor o sensación de malestar.
Aunque pueda parecer ilógico, la procrastinación no es un problema propio de la organización del tiempo, ya que las personas con este dilema poseen una mayor habilidad para estimar tiempos y cuentan con mayor optimismo frente a las situaciones, el problema fundamental es que el tiempo es utilizado en actividades incorrectas.
¿Cómo afecta el procrastinar en el trabajo a tu empresa?
Las empresas que sufren descuidos tienen el riesgo de disminuir toda su calidad dentro de los productos o servicios que ofrecen al público. Dentro de la vida empresarial cualquier proyecto, presentación o forma tiene una fecha máxima de entrega y una expectativa de calidad propia de su naturaleza, y hacer cualquiera de ellas en último momento no fortalecerá las opciones de obtener el mejor resultado.
¿Cómo se puede identificar a quienes procrastinan en el trabajo?
Existen varios indicadores que servirán de ayuda para identificar procrastinadores:
- Dentro de la empresa buscan distraerse activamente.
- Optan por no afrontar responsabilidades muy fuertes.
- Suelen complicar las cosas más sencillas.
¿Cuáles son las causas más frecuentes de la procrastinación en el trabajo?
Las causas que pueden dar origen a procrastinar en el trabajo son:
- Actitud perezosa del trabajador en su puesto de trabajo.
- Evidente falta de autocontrol.
- Temor al fracaso.
- Malos hábitos laborales y de concentración desarrollados.
- Perfeccionismo exagerado.
- La percepción de que el trabajo no tiene mayor urgencia.
- Confusión con la tarea solicitada, y tener miedo a preguntar.
- Diálogo interno con negatividad.
- Miedo a los proyectos complejos y abrumadores.
- No coordinar el tiempo de las tareas y hacer varias a la vez.
Como podrás darte cuenta casi todos los motivos provienen de un inhibidor central que conlleva a la procrastinación en el trabajo, y es la falta de claridad.
Si desarrollaste el hábito de la procrastinación, posiblemente no tengas una percepción clara y concisa de por qué tu trabajo es importante y no puedes menospreciarlo.
¿Cómo puedes resolver el problema de la falta de claridad frente a la procrastinación?
Para solucionar el problema de falta de claridad puedes:
Crear objetivos en el equipo o en el departamento
Si para ti o para los miembros de tu equipo es complicado notar cómo se conectan los trabajos de cada quien con los objetivos adquiridos y amplios de la empresa, puedes analizar la posibilidad de crear objetivos en el equipo o en departamento determinados. Te ayudará a asociar en el trabajo los objetivos del equipo, y comprobar el impacto que origina.
Conectar tu trabajo personal con los objetivos de la empresa
Aunque no hayas podido generar los objetivos del equipo o de la empresa, puedes buscar una forma de ver cómo puede conectarse tu trabajo directamente con los objetivos corporativos, como por ejemplo, si comprendes el impacto que conlleva tu trabajo en un determinado proyecto orientado a un objetivo corporativo, podrás entender mejor cuál es el aporte de tu trabajo a la empresa.
¿Cómo superar la procrastinación en el trabajo?
Para combatir efectivamente el hecho de procrastinar en el trabajo, puedes crear objetivos a corto plazo para el equipo o el departamento, también vincular tu trabajo personal con los objetivos corporativos.
Puedes poner en práctica los siguientes consejos para ponerle fin a la procrastinación en el trabajo:
Conecta el trabajo con los objetivos
La mejor forma de dejar de procrastinar es cuando se entiende claramente tu contribución con tu trabajo y para los objetivos del equipo o de la empresa. Al tener ese nivel de claridad, el trabajo recuperará el sentido. En vez de trabajar por trabajar se ampliará tu visión de contribución.
Aclara las prioridades
Probablemente, las fechas de entrega sufran cambios a causa de que un proyecto tenga prioridad, porque el líder del equipo asigna tareas según la modificación que se haga en el último momento frente las necesidades, etc. Pero si sabes cuáles son los trabajos de mayor importancia estarás preparado para la gestión de prioridades.
Utiliza los objetivos para combatir el perfeccionismo
Generalmente, los procrastinadores crónicos, en realidad son perfeccionistas ocultos. Si se da el caso de que la presión del trabajo resulta abrumadora, puedes resolverlo teniendo en cuenta que la perfección es sumamente difícil por no decir imposible, y que al tener los objetivos definidos será más sencillo el logro de los objetivos laborales.
Divide las iniciativas grandes en tareas más pequeñas
En lugar de sentirte colapsado por la gran cantidad de tareas o de proyectos, puedes dividir el trabajo en partes más pequeñas. Utiliza una herramienta de gestión de proyectos para así hacer seguimiento al trabajo y poder organizarlo.
Establece tus fechas de entrega
Si no tienes claro cuándo hay que entregar un trabajo, será difícil caer en la tentación de postergarlos.
Las fechas de entrega claras te ayudarán a entender la prioridad de un determinado trabajo. Por el contrario, si no precisan una fecha de entrega, puedes marcar la fecha según tus proyectos y prioridades de entrega para controlar tus tareas, y evitar acumulación de trabajo o problemas futuros.
En Melt Group te garantizamos un servicio óptimo e integral adaptándonos a tus necesidades, siempre buscando lo mejor para nuestros clientes y su emprendimiento.
Nuestros profesionales te atenderán con la mejor asesoría en cualquiera de las situaciones que se te presenten en tu empresa.
Podemos ayudarte a acabar con procrastinar en el trabajo. .